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Si bien continua la tensión geopolítica, la economía de EE. UU. ahora está más cerca del equilibrio y una recesión parece poco probable. Esto ha llevado a un fuerte cambio en las expectativas sobre su política monetaria. El retroceso de la inflación y el enfriamiento del mercado laboral refuerzan las esperanzas de un fin inminente de las subidas de tipos.

Estamos en un momento oportuno. En nuestro escenario base, esperamos que el efectivo, los bonos, las acciones y las alternativas ofrezcan buenos rendimientos durante los próximos seis a 12 meses y a largo plazo.

Recomendamos que los inversionistas mantengan un buen equilibrio entre las clases de activos en sus carteras con el fin de gestionar posibles riesgos y garantizar que los rendimientos sean duraderos. La diversificación de carteras con una variedad de multiactivos suele ser la pieza clave de una estrategia patrimonial eficaz.