Family office

Hoy en día se están transfiriendo cantidades casi inimaginables de riqueza de las generaciones mayores a las más jóvenes. Sin embargo, casi 70% de las familias acaudaladas acaban perdiendo el control de su patrimonio cuando éste se transfiere de la primera a la segunda generación. Explicamos los principales problemas y cómo armar una estrategia para consolidar y proteger la familia y su patrimonio durante generaciones.

Abuelo trabajador, hijo millonario, nieto pobre

Son muchos los factores que pueden llevar a las familias a perder su riqueza. Conozca los principales problemas

Problema 1

No tener un plan para transferir el patrimonio a la siguiente generación (planificación sucesoria)

Este es uno de los factores más importantes, especialmente cuando la riqueza se transfiere de la primera generación a la segunda. Según una encuesta mundial de PwC sobre empresas familiares, solo el 34% de los miembros de la familia que transfieren su patrimonio tienen un testamento - y eso es apenas una pieza del rompecabezas de la planificación sucesoria. Muchos jefes de familia son reacios a hablar del tema o incluso a ceder el control de la empresa familiar. ¿Quién tomará las riendas cuando ellos fallezcan?

Problema 2

No comunicarse correctamente

Los miembros de una familia suelen evitar hablar de temas importantes sobre el patrimonio familiar. ¿El resultado? Malentendidos y conflictos en el futuro. Una encuesta reveló que solo el 15% de las familias tienen procesos para gestionar los conflictos y fomentar una mejor comunicación entre los miembros de la familia.

Problema 3

No compartir información sobre las decisiones que se toman

Los miembros o grupos dentro de la familia que toman decisiones sin compartir la información con el resto pueden dañar gravemente la confianza y la credibilidad. Los miembros de la familia pueden sentirse excluidos y pueden hasta decidir no formar parte de la empresa familiar o incluso del negocio familiar en su conjunto.

Problema 4

No tener una gobernanza familiar adecuada

Las empresas exitosas tienen una gobernanza sólida: procesos y principios que garantizan que la empresa funcione de la mejor manera posible. Y lo mismo deberían tener las familias. Sin embargo, muchas familias carecen de la gobernanza necesaria para tomar decisiones informadas, compartir información y unir a la familia en torno a objetivos comunes. ¿La respuesta? Un “protocolo familiar” (o “constitución familiar”), que describa los valores de la familia, los principios de compromiso, la gobernanza y el proceso de comunicación.

Manteniendo el rumbo de la familia

Pasos para armar la estrategia de su familia

Paso 1

Encuentre respuestas para las preguntas de su familia

Pregúnteles a los miembros de su familia sobre cuestiones como la estructura de la familia y sus objetivos y funciones dentro de ella. Normalmente obtendrá las respuestas que necesita a través de conversaciones, entrevistas y talleres moderados. Un buen punto de partida es utilizar la guía práctica que acompaña a este manual y reflexionar sobre su propia situación.

Paso 2

Contrate a un asesor familiar

Un asesor familiar con experiencia comprenderá todos los aspectos importantes de la creación de una estrategia y gobernanza familiar. Será independiente de la situación de su familia, pero habrá trabajado con muchas otras familias. Puede aportar ideas valiosas, ayudarle a evitar los escollos que surjan en el camino y guiarle en cada paso.

Paso 3

Documente su estrategia en un “protocolo familiar” (o “constitución familiar”)

Se trata de un documento escrito moralmente vinculante que establece la estrategia y la gobernanza de su familia. Sus temas suelen incluir:

  • Cuáles son los valores compartidos y las convicciones de la familia;
  • Cómo define la familia su propia empresa;
  • Quién es el propietario del patrimonio familiar y los principios que rigen esa propiedad;
  • Cómo deberían participar los miembros de la familia en la empresa familiar (por ejemplo, los principios de trabajo en la empresa, en el family office o en la fundación de beneficencia);
  • Quién decide sobre los negocios, el patrimonio o los asuntos relacionados con la familia y cómo se toman estas decisiones;
  • Cómo cultiva la familia el talento de sus miembros; y
  • Qué actividades conjuntas podrían mejorar la comunicación y la armonía entre las generaciones.

Paso 4

Establezca órganos de gobierno

Para dar vida a su estrategia familiar, deberá crear uno o varios órganos de gobierno para la toma de decisiones, como una asamblea familiar, un consejo de familia y otros consejos consultivos. A medida que defina su estrategia familiar, descubrirá qué órganos son los que necesita su familia.

Paso 5

Formalice contratos y acuerdos

Para que las disposiciones de su protocolo familiar sean válidas, quizá deba añadir algunas de ellas a acuerdos, contratos y convenios legalmente vinculantes ya existentes o nuevos, como cartas de última voluntad, fideicomisos, testamentos y acuerdos legales de accionistas.

Paso 6

Revise todo con regularidad

Las familias cambian. Se incorporan nuevos miembros a la familia, otros se marchan y las generaciones más jóvenes pronto alcanzan la edad suficiente para dirigir áreas del emprendimiento familiar. En consecuencia, es necesario revisar periódicamente todos los aspectos de su estrategia familiar, su protocolo y sus acuerdos legales.

¿Con qué frecuencia? Cuando el emprendimiento familiar es relativamente estable, puede bastar con una revisión cada cinco o diez años. Pero si su familia está atravesando un cambio importante, como la transferencia de su patrimonio, es aconsejable revisarla con más regularidad.

Tenga en cuenta que cada nueva generación aborda los asuntos familiares desde una nueva perspectiva. Eso significa que, cuando se incorporen, tendrá que establecer una nueva estrategia. De este modo, se asegurará de que puedan seguir adelante, libres de las limitaciones del pasado familiar.

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